Introducción
- La videovigilancia remota o televigilancia permite a las empresas un seguimiento exhaustivo y completo del negocio de forma práctica, sencilla, flexible y 24/7.
- Una de las principales ventajas de este servicio de seguridad remota es su eficiencia para adaptarse a todo tipo de negocios.
Cada vez más empresas optan por servicios remotos de seguridad como la televigilancia o videovigilancia remota. Los avances en sistemas anti-intrusión, cámaras de CCTV o analítica de vídeo, y una mayor conectividad permiten realizar una serie de actividades de seguridad en remoto de manera más eficiente y flexible.
La tecnología de vigilancia remota es un gran aliado para controlar y monitorizar lo que ocurre en las instalaciones de un negocio en todo momento.
¿Qué es la televigilancia?
La televigilancia o vigilancia remota se realiza conectando los sistemas de seguridad electrónica de las instalaciones del cliente con un centro de control remoto atendido por profesionales especializados. De esta forma, el cliente puede estar tranquilo y centrarse en su negocio.
Los servicios remotos proporcionan a las empresas mayor eficiencia y ahorro de costes, así como una gran flexibilidad. De esta forma es más fácil programar rondas remotas en tramos horarios concretos, como picos o valles de actividad.
Los servicios remotos también permiten a los vigilantes dedicarse a tareas de mayor valor. Por ejemplo, si el control de accesos se realiza de manera remota, el vigilante puede salir de la garita para hacer rondas preventivas por la instalación.
Además, uno de los grandes valores de los servicios remotos de Securitas es la profesionalidad del personal de nuestro centro de control remoto el Securitas Operation Center (SOC). El personal del SOC realiza sus tareas de vigilancia bajo protocolos y procedimientos consistentes y exigentes.
¿Cómo funciona la televigilancia?
Los servicios de vigilancia remota detectan irregularidades o peligros, como un intento de robo o las primeras señales de un incendio. En servicios como las rondas o escolta remota, los vigilantes especializados de Securitas son los encargados de detectar estas incidencias. Las rondas remotas, el control remoto de accesos o la escolta remota son servicios donde el personal especializado del SOC se conecta a las cámaras de tu instalación en los horarios acordados.
También hay sistemas que hacen saltar la alarma mediante analítica de vídeo. Los sistemas de vídeo inteligente permiten detectar de manera automática diferentes situaciones como el acceso a una zona restringida, un salto de valla o la presencia de un objeto sospechoso. El SOC recibe el aviso y toma las decisiones pertinentes.
Cuando el SOC recibe una alerta se encarga de evaluar el nivel de riesgo y determinar si la incidencia es real o si se trata de una falsa alarma. Si fuera necesario, se da aviso al servicio de acuda y/o a los servicios de emergencia. Por último, una vez cerrado el incidente, la empresa de seguridad entrega un informe detallado al cliente.
La importancia del centro de control remoto en el servicio de televigilancia
Un centro de control remoto es, básicamente, el cerebro de un sistema de vigilancia remota. Conecta todos los elementos de seguridad para proteger el espacio que se quiere asegurar.
El centro de control remoto debe prevenir, supervisar, detectar incidencias, desencadenar las respuestas adecuadas y almacenar las imágenes en caso de que las fuerzas de seguridad requieran material grabado para investigar cualquier incidente.
El Securitas Operations Center (SOC) es el núcleo central de Securitas, donde se coordinan todos los servicios, tanto desde el punto de vista operativo como técnico, para conectar al personal operativo, la tecnología y los procesos.
Este centro de operaciones está compuesto por tres capas de servicio integradas, con distintos grados de especialización. Esto permite que las empresas puedan centrarse en sus negocios, pero sin perder el control y capacidad de reacción sobre la seguridad de sus instalaciones.
La Central Receptora de Alarmas (CRA), homologada por la Policía para la recepción y verificación de alarmas, conforma esta primera capa. Se integra al Centro de Control, que coordina y presta soporte al personal de vigilancia. Los servicios de valor añadido, como el reporting o la analítica de datos, completan estas capas integradas.
La parte técnica es tan importante como la humana en un centro de control remoto. La experiencia y la formación especializada de los empleados que trabajan en él son imprescindibles para que un sistema de vigilancia remota funcione de manera óptima.
Servicios de vigilancia según el tipo de empresa
No todas las empresas requieren del mismo sistema de televigilancia. Otra característica de este servicio remoto es que se adapta, de manera eficiente, según el tipo de negocio.
La vigilancia remota en las farmacias
En el caso de las farmacias, los sistemas de videovigilancia conectados a un centro de control remoto son una de las mejores opciones para asegurar estos locales frente a posibles robos y entradas no autorizadas.
Las farmacias son comercios especialmente sensibles en materia de seguridad por su actividad y por los medicamentos y productos que almacenan. La disposición de dinero en efectivo es otra característica que aumenta la probabilidad de atracos e intrusiones. Por eso, la mayoría de las farmacias cuentan con medidas de seguridad como sistemas de vigilancia remota.
Es recomendable que un sistema de televigilancia para farmacias cumpla con ciertas características, como, por ejemplo, la monitorización de las cámaras por parte de un centro de control remoto para poder realizar verificaciones en cualquier tipo de emergencia.
Este sistema de vigilancia remota puede combinarse con cámaras infrarrojas o cámaras con sensores de movimiento. Los sensores magnéticos y de movimiento, que ayudan a detectar si alguien pretende abrir o cerrar ventanas o puertas, son otros complementos de seguridad elegidos por las farmacias.
El servicio de acuda también es muy importante para este sector. Consiste en que un vigilante capacitado acuda al establecimiento inmediatamente ante una activación de alarma.
La vigilancia en las plataformas logísticas
Un microhub logístico puede definirse como la instalación donde los bienes y productos destinados a entregas se agrupan dentro de los límites de un área urbana determinada. Estas plataformas se han multiplicado con la pandemia por el crecimiento del volumen de entregas por compras online.
Actualmente, la integración de sistemas de seguridad electrónica (control de accesos, videovigilancia, lectores de matrículas, sistemas anti-intrusión, etc.) y su conexión a centros de control remotos permite a los operadores logísticos optimizar sus recursos. El objetivo es garantizar un nivel de seguridad acorde al riesgo concreto de su negocio.
Estos microhubs suelen operar las 24 horas del día, lo que implica optimizar costes y personal en horarios de menor actividad. Una solución son los servicios basados en tecnología. El control remoto de accesos es el mejor ejemplo: permite llevar a cabo esta necesidad básica en períodos de baja actividad, de manera segura y eficiente.
En este sentido, la protección perimetral remota junto con la analítica de vídeo están permitiendo mejorar la seguridad y la capacidad de respuesta ante los incidentes que se reportan. De esta manera, las empresas pueden apostar por los servicios remotos y reducir las necesidades de vigilancia presencial.
La vigilancia en la industria
Un buen sistema de televigilancia para la industria debe suministrar soluciones para reducir los riesgos de seguridad en la cadena de producción y, a su vez, crear un entorno de trabajo seguro para los empleados.
Cámaras de videovigilancia perimetral, monitorización remota de las centrales de incendio, control de parámetros críticos para la producción (por ejemplo, la temperatura), confirmación de alarma, control de accesos de personal y la posibilidad de realizar un control remoto de varias plantas simultáneamente son servicios fundamentales para el sector industrial en materia de seguridad.
Esta combinación de servicios permite a las industrias:
- La optimización de los tiempos a la hora de identificar y solventar problemas, lo que repercute en un aumento de la seguridad.
- La tranquilidad de garantizar la seguridad de todos los trabajadores en sus respectivos centros de tareas.
El análisis de datos de estas cámaras permite, muchas veces, implementar mejoras en las fábricas y optimizar los procesos de trabajo.
En conclusión, la televigilancia es un servicio que aporta ahorro de costes, flexibilidad y una mayor capacidad de reacción para empresas de distinto tamaño y sector.