Introducción
- Las instalaciones de protección contra incendios (PCI) tienen tres objetivos esenciales: proteger la vida evitando daños a las personas y otros seres vivos; proteger edificaciones e industrias evitando cuantiosas pérdidas económicas y proteger el medioambiente, evitando distintos tipos de contaminación y estragos.
¿Para qué sirve el mantenimiento de los sistemas de PCI?
Cuando se diseñan e instalan correctamente, los sistemas de PCI son capaces de responder ante una emergencia de manera rápida y eficaz, pero para ello también es necesario que se mantengan e inspeccionen periódicamente.
Afortunadamente, muchos de los sistemas de protección contra incendios acaban su vida útil sin haber tenido que actuar ante un incendio real. Además, al tratarse de sistemas que no influyen en el confort o en la producción de una instalación, tienden a pasar desapercibidos en el día a día.
Sin embargo, no hay que olvidar que el riesgo de incendio siempre está latente, y que la alarma se puede presentar en cualquier momento. Es precisamente en ese instante cuando resulta vital garantizar que los sistemas de protección estén plenamente operativos. No hacerlo puede suponer gravísimas consecuencias humanas y también económicas como las derivadas de una parada total de la producción en una industria o su propia desaparición.
Las estadísticas de incendios registrados en edificios e industrias muestran en muchos casos fallos evitables en los sistemas de protección contra incendios. En ese listado de deficiencias destacan las siguientes:
- Sistemas no actualizados ante unos riesgos que han cambiado.
- Sistemas fuera de servicio.
- Componentes de los sistemas dañados en el momento de actuar.
- Uso manual inadecuado de los sistemas en el momento de la emergencia por falta de formación del usuario.
Esto evidencia la necesidad de tener un buen programa de mantenimiento para dichas instalaciones y elementos, que incluya la descripción y la frecuencia de las pruebas a realizar.
¿Cómo se regula el mantenimiento en las instalaciones de protección contra incendios?
Las operaciones de inspección, prueba y mantenimiento de los sistemas contra incendios vienen definidas en el Real Decreto 513/2017 por el que se aprobó el Reglamento de Instalaciones de Protección Contra Incendios. Aquí se definen operaciones mínimas trimestrales, semestrales, anuales y quinquenales. Estás se diferencian entre las operaciones a completar por el usuario de las instalaciones (TABLA I) y las que tiene que realizar una empresa mantenedora de sistemas de protección contra incendios (TABLA II).
El reglamento también establece que las actas de mantenimiento donde se recogen las operaciones a realizar deben cumplir con la serie de normas UNE 23580, y en el caso específico de algunos sistemas de protección, como son los extintores, bocas de incendios o sistemas de extinción mediante rociadores de agua, entre otros, deben tener en cuenta las operaciones de mantenimiento indicadas en las normas de aplicación de estos sistemas.
También se deben tener en cuenta las operaciones preventivas y correctivas que indiquen los propios fabricantes de los sistemas dentro de las operaciones de mantenimiento así como los requerimientos de organismos de prestigio y compañías de seguros (FM GLOBAL, CEPREVEN, etc.)
¿Qué tipos de mantenimiento existen?
Principalmente existen tres tipos de mantenimiento para los sistemas de protección contra incendios:
- Mantenimiento Preventivo/Predictivo: Este mantenimiento está basado en las indicaciones de las normativas aplicables y en las recomendaciones del fabricante de los equipos. El objetivo de estas actuaciones es alargar la vida útil de los sistemas y garantizar su funcionamiento constante, evitando fallos y averías que dejen los sistemas fuera de servicio. Consiste en realizar el engrase, limpieza, ajuste, mediciones y sustitución de todos los elementos del sistema que lo requieran, y llevar a cabo todas las pruebas necesarias de funcionamiento para comprobar el estado real del equipo y confirmar que las condiciones de operatividad y seguridad con óptimas.
- Mantenimiento Correctivo. Este mantenimiento se lleva a cabo cuando un equipo de protección queda fuera de servicio o su funcionamiento no ofrece garantías de seguridad por una avería. En estos casos se realizan las actuaciones necesarias para restaurar el sistema a la operatividad requerida.
- Mantenimiento de Actualización. Para dotar a los sistemas de protección de una mayor eficiencia y mejores estándares de seguridad se llevan a cabo operaciones de actualización y modificación. Estas actuaciones se realizan cuando los sistemas tienen ya cierta antigüedad y deben adecuarse a normativas actuales, siempre que sea posible y lo permita la tecnología.
¿Qué son los checklist o protocolos de mantenimiento en sistemas de PCI?
Una de las herramientas más valiosas de las que debe disponer una empresa mantenedora de sistemas de protección contra incendios son los checklist o protocolos de mantenimiento.
Un checklist correctamente definido por parte de la empresa mantenedora permite por un lado establecer un procedimiento para que el personal técnico realice todas las pruebas necesarias y poder así determinar si un sistema sigue estando operativo y acorde al riesgo que protege. Por otro lado, proporciona una fuente fiable de información para poder documentar el estado real de los sistemas mediante la elaboración de un informe de anomalías y recomendaciones para presentar al propietario y/o usuario de estas, o ante el requerimiento de la autoridad competente en caso de un siniestro. Este informe debe ser custodiado durante un periodo de 5 años posteriores a su emisión.
En este contexto es muy importante que la empresa mantenedora cuente con un plan de formación continua del personal técnico de mantenimiento. De esta manera todas las operaciones de pruebas y mantenimiento realizadas sobre los sistemas se llevan a cabo sin ocasionar daños en las instalaciones y evitando que se produzcan activaciones indeseadas ni paradas de la producción de las empresas. Además, se consigue que la documentación derivada del mantenimiento se cumplimente correctamente, y que no existan dudas sobre la operatividad de los equipos.
De poco servirá que todas las operaciones se hagan correctamente en campo, si luego las actas no se cumplimentan correctamente y no son válidas para poder realizar un informe del estado de las instalaciones.
La clave: elegir el partner correcto
Los sistemas PCI son parte esencial de la seguridad en nuestras vidas, tanto en los edificios de viviendas, como en el resto de actividades y edificaciones: empresas, industrias, comercios, hospitales, centros educativos, residencias, infraestructuras… Cualquier carencia en su mantenimiento pueden suponer un peligro grave para la seguridad de personas y bienes.
Por ello el mantenimiento de las instalaciones de protección contra incendios debe ser realizado siempre por empresas especializadas y homologadas, que cumplan los requisitos señalados en la reglamentación (Reglamento de instalaciones de protección contra incendios RD 513/2017). Ellas son las responsables de identificar las deficiencias de las instalaciones de protección contra incendios y asegurar que estos sistemas funcionen al 100% de sus capacidades en caso de emergencia.
La elección del partner para el mantenimiento de sus sistemas de PCI es en definitiva una de las decisiones más importantes que han de tomar los responsables de cualquier edificio o instalación.